Ingredientes:

  • Pollo Nutrave
  • Aceite de oliva
  • Harina
  • Leche
  • Calabacín
  • Miel
  • Moras silvestres
  • Masa quebrada
  • Pimienta
  • Sal

Elaboración:

Salpimentar y dorar el pollo Nutrave en aceite de oliva y reservarlo (mejor poca pimienta si es para niños). Yo he optado por unos traseros de pollo: bien limpitos de grasa son una opción estupenda para los niños, por ser especialmente jugosos y tiernos (¡y Nutrave, faltaría más!).

Pochar suavemente unas láminas de calabacín cortadas muy, muy finitas (yo he empleado un pelador) y sin moverlas mucho para evitar que se rompan; cuando el calabacín empiece a transparentarse añadir la miel (una cucharada sopera) y dejar que reduzca un poco (pero no demasiado porque no se trata de caramelizar la verdura: si conservan el color verde brillante de la piel y su textura crujiente resultan más atractivas al ojo/diente (importante para los canijos).

Preparar una bechamel al uso con aceite de oliva, harina, leche entera y sal; pero una vez ligada añadir un puré de moras recién trituradas en cantidad suficiente para que se coloree netamente de violeta la bechamel. Dependiendo del grado de madurez de las moras la bechamel resultará más o menos dulce. En mi caso he optado por un dulzor moderado (pues el calabacín ya lo será suficiente) y que así respete el sabor del pollo bien dorado al que va a cubrir.

Con una lámina de masa quebrada se hacen pequeños paquetes con el pollo Nutrave y la bechamel dentro en sendas capas, se untan de huevo batido y queso rallado, y se hornean una media hora a 200 ºC.

Se sirven calientes, con el calabacín a la miel de acompañamiento. Si se quiere, añadir también un poco del puré de moras silvestres.

Receta enviada por David Palomino Nantón, ganador del 12º Reto de Pepe Rodríguez.